Elección de la empresa de catering

Ya hemos hablado en posts anteriores sobre la elección del menú y la degustación, pero no hablamos de la empresa que nos proveerá de ese servicio, por eso hoy quiero hablarles precisamente de eso.

Generalmente, cada sede tiene un proveedor de catering con el que trabaja habitualmente, y en la mayoría de los casos esta es la mejor opción a elegir, pero no quiere decir que sea la única. A no ser que se trate de salones en hoteles de 4 o 5 estrellas, donde el banquete en este caso es proporcionado por el mismo hotel, sin ninguna posibilidad de contratar catering externo, podemos elegir otra empresa de catering diferente de la que nos recomienda la sede (siempre que la sede permita el ingreso de proveedores externos).

Cualquiera fuera el caso, yo les recomiendo que hagan las siguientes preguntas a la empresa de catering antes de contratarla:

• ¿Qué incluye el precio que estamos pagando por persona?
• ¿Se especializan en algún tipo de comida en particular?, ¿es un servicio cerrado o aceptan sugerencias?
• ¿Quién es la persona encargada para el día de la boda, por cualquier reclamo/eventualidad que pudiera ocurrir?
• ¿Tienen fotografías de eventos anteriores?
• ¿A quienes podemos pedirles referencias?
• ¿Incluyen servicio de bebidas/bar?, en caso afirmativo, ¿tiene un costo adicional?, ¿qué incluye (vasos, servilletas de cóctel, hielo, etc)?
• ¿Cada cuántos invitados asignan un mozo?
• ¿Qué indumentaria usará el personal el día de la boda?
• ¿Poseen habilitación profesional?
• ¿Poseen ART para sus empleados?
• ¿Ustedes se encargan de la mantelería y vajilla?

Y luego de todo esto, las preguntas que hacen referencia específicamente al menú, como expliqué en el post de elección del menú.

Por último, debemos asegurarnos que todo lo que arreglemos con la empresa, esté debidamente plasmado en el contrato. Además, en el contrato hay que agregar la fecha en la que vamos a realizar el pago y confirmar la cantidad de invitados (hay que acordarse en estos casos, que siempre nos van a cobrar por un mínimo de cantidad de invitados, que si no llegamos a cubrirlo debemos pagar de todos modos, y apropósito, esta cantidad mínima de comensales es otra de las preguntas que debemos realizar).